Pasado El Día de Todos los Santos, nos damos cuenta de que la muerte de cualquier familiar nos afecta, al igual que lo hará el día que falte nuestra mascota. Es algo que tarde o temprano todos los que tenemos animales tenemos que afrontar como parte de la vida y saber qué trámites legales tenemos que hacer nos ayudará a estar mejor preparados cuando pase.
Si nuestro animal fallece en una clínica veterinaria será mucho más fácil para nosotros. Serán ellos los que se harán cargo de los trámites legales y te ofrecerán las diferentes opciones que haya y los precios. Sin embargo, si lo perdemos en nuestra casa o en un lugar público, hay que seguir ciertos pasos. Lo primero que debes saber es que, según la ley en España, está prohibido enterrar animales en un lugar no autorizado. Entonces, tendrás dos opciones:
- Enterrarlo en un cementerio para mascotas autorizado. En España no hay muchos y las tarifas son muy variadas.
Por ejemplo: Cementerio de Pequeños Animales (Barcelona), El último parque (Madrid)… etc. - Incinerarlo, que suele ser lo más fácil y económico. Puede ser una incineración colectiva (realizada por el Ayuntamiento que tiene servicio de retirada de animales fallecidos) o individual, mediante una empresa privada.
Por ejemplo: Bosque del silencio (Madrid), Adiós Mascota (Madrid y Barcelona), Cremacan (Canarias)… etc.
Otro paso importante a realizar es el comunicado de baja del animal. Hay que contactar con el Archivo de Identificación de Animales de Compañía de la comunidad autónoma que corresponda y comunicar la muerte de nuestra mascota dando el número de microchip.
Es importante saber que, en caso de necesitar ayuda, te aconsejamos que recurras a tu clínica veterinaria de confianza, donde te asesorarán y te ayudarán seguro.