¿Cómo presentar a dos gatos?
Si estás pensando en darle un nuevo compañero a tu gato o gatos, tienes que tener en cuenta unos pasos previos para que se toleren bien. Los gatos son muy territoriales y les encanta la rutina, así que si les fuerzas a estar juntos, lo más probable es que se agredan, por lo que presentarlos de manera gradual hará que se lleven bien entre ellos.
Cada paso necesitará su tiempo. No pases al siguiente paso hasta que les veas cómodos y a gusto.
1. Antes de la llegada: Crea su espacio seguro
- Reserva una habitación para el nuevo gato, donde el gato o gatos de la casa no puedan entrar.
- Esta habitación tiene que tener todo lo necesario: arenero, comida, agua, juguetes, rascador…
- Puedes usar feromonas sintéticas en difusor en la habitación. Esto creará un ambiente positivo para él.
2. La llegada del gato
- Instala al nuevo gato en su habitación (su espacio seguro) y de ninguna forma dejes pasar al gato o gatos de la casa.
- Aunque no se vean, ya saben que hay más gatos por el olor. Si ves que se bufan o gruñen (incluso con la puerta cerrada), no los regañes. Distráeles jugando o llevándolos con comida a otra zona.
3. La presentación por olores
- Cuando veas que el gato nuevo ya se ha acostumbrado a su habitación, confina al gato o gatos de la casa (por ejemplo en la cocina u otra sala) y deja explorar al gato nuevo el resto de la casa durante un tiempo corto. Luego vuelve a ponerlo en su habitación y a liberar a los otros.
- Al mismo tiempo, coge toallas o mantas diferentes y frota a cada gato con una de ellas. Dásela al otro gato para que investigue el olor del otro. Puedes asociarlo a algo positivo dándole comida, jugando o acariciándole.
- El objetivo es llegar a conseguir que se restrieguen y froten con las toallas. ¡Nunca les fuerces! Una vez lo hagan, puedes juntar las toallas y frotarles a ellos directamente.
4. El contacto visual
- Si ya se toleran por el olor, no hay bufidos, ni gruñidos y les ves cómodos, el siguiente paso es abrirles la puerta para que se vean, pero no se toquen. Usa una barrera, como una malla.
- Foméntalo con algo positivo, por ejemplo, ponles la comida para que se vean mientras comen.
5. Comienza a juntarlos
- El último paso es empezar a quitar esa barrera que les impedía tocarse y dejar que se huelan y toquen. Siempre bajo tu supervisión.
- Puedes asociarlo con algo positivo, nuevamente usando comida, juegos o caricias.
- Es importante que se puedan retirar o esconder si lo desean.
Repite cada paso todos los días hasta que se pueda pasar al siguiente. Cada gato es diferente y tendrá su propio tiempo de adaptación. Es importante no forzarles y si hay cualquier gesto de incomodidad, como gruñidos o bufidos, volver al paso anterior.
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